Si se es consumidor, posiblemente se quiera saber cómo hacer una receta fácil para hacer galletas de marihuana. Se trata de una forma diferente de consumo con la que poder sorprender a todos los amigos. Las galletas de marihuana pueden prepararse con prácticamente cualquier clase de cannabis.
Eso sí, si se quiere que las galletas cookies con marihuana salgan bien, siempre es recomendable seleccionar el cannabis. Utilizar un cannabis seleccionado hará que las galletas de marihuana salgan perfectas.
Podemos decir que el cannabis es un producto muy versátil. Lo podemos ver en chicles, caramelos, cerveza, cremas, etc. ¿Por qué no usarlo también en la cocina? Se pueden hacer brownies de maría, tartas cannábicas o, como vamos a ver, cómo hacer galletas de la risa.
Esta receta fácil para hacer galletas de marihuana tiene una base muy parecida a la masa de cualquier galleta. Lo que cambia es el ingrediente especial que todos conocemos. Además, teniendo esta receta para galletas de marihuana como base, siempre se pueden probar otros ingredientes.
Si quieres hacer estas galletas, debes saber que esta fácil receta para hacer galletas de marihuana puede ser alterada como queramos. Se pueden incorporar chips de chocolate, frutos secos, frutas deshidratadas o cualquier otra clase de toppin.
Para hacer galletas de maría para 6 personas necesitaremos los siguientes ingredientes:
Esta receta fácil para hacer galletas de marihuana se comenzará precalentando el horno a 150º. Se pondrá la mantequilla a fuego lento en una sartén. Mientras el horno adquiere calor y la mantequilla se derrite, hay que usar el grinder para triturar bien la marihuana. Cuando esté lista, se incorporará en la mantequilla en el momento que esta esté fundida.
Ahora toca una de las partes más pesadas de la receta. Debemos remover bien la maría en la mantequilla a fuego lento durante una media hora aproximadamente. El siguiente paso es colar la mantequilla y verterla en un recipiente. Hay que presionar bien la marihuana para extraer al máximo toda la mantequilla y el sabor que queda. Dejar que se quede tibia en el recipiente.
Cuando la mantequilla esté casi fría, se incorporarán los huevos y se mezclará hasta que todo esté bien integrado. En otro recipiente se pondrán los ingredientes secos: harina, levadura, vainilla, azúcar y la sal. Se mezclará un poco y se incorporará la mezcla de la mantequilla con los huevos.
Aquí hay que trabajar bastante bien todos los ingredientes hasta que queden bien incorporados. Se debe conseguir una masa fina, que no se pegue demasiado a las manos. En este momento se incorporarán los chips de chocolate.
El siguiente paso en esta receta fácil para hacer galletas de marihuana es dar forma a las galletas. Para ello, se puede utilizar un molde como los que puede haber en cualquier casa o comprarlos. También se puede usar un vaso para darles forma redonda o un cuchillo para hacerlas con formas geométricas, etc.
Cuando se hayan preparado todas, hay que ponerlas sobre un papel de horno y una bandeja. Tendrán que hornearse durante unos 45 minutos. Hay que controlarlas para que no se doren demasiado o se quemen. Una vez listas, se deben dejar reposar durante unos 20 minutos antes de servir. Se pueden acompañar con helado de vainilla para sorprender a todo el mundo a la hora de consumirlas.
Como se ha podido ver, es una receta fácil para hacer galletas de marihuana. Hay que tener presente ciertos aspectos antes de lanzarse a comerlas, por muy bien que huelan y sepan.
Estas galletas deben ser consumidas con moderación, sobre todo si quien las va a comer no está acostumbrado al cannabis. Se recomienda no hacer galletas demasiado grandes. Lo mejor es prepararlas de tamaño mediano o pequeño. De esta forma se puede repetir más adelante.
La marihuana consumida de forma oral tarda más tiempo en hacer efecto. Hay que comerlas esperando un poco para sentir los efectos. Luego ya se puede decidir si se come otra galleta o no.
No importa si se está acostumbrado al cannabis, no se recomienda comer varias al mismo tiempo. Se puede producir una experiencia bastante desagradable. Por eso se aconseja comerlas muy poco a poco, espaciando la ingesta al menos una hora entre una y otra.
El efecto debe ser relajante y agradable, no mareos o cualquier otro síntoma negativo. Si se producen estos efectos negativos, lo mejor es no seguir comiéndolas.
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