La marihuana está de moda. Con la legalización de su uso terapéutico en cada vez más sitios, su consumo está en auge. Por eso cada vez más gente se interesa por su cultivo, y ese interés se orienta sobre todo hacia el cultivar marihuana en interior.
La producción de marihuana en interior no es excesivamente compleja, pero requiere de unos conocimientos básicos de jardinería.
El sustrato es la base para el cultivo de marihuana. El más habitual en la mayor parte de campos y jardines es la tierra, pero en principio cualquier otro material orgánico podría servir. Existen cultivos sobre hojas, sobre cáscaras, sobre corteza de árbol…
El mejor sustrato para cultivar marihuana en interior es la tierra, ya que por sus características consigue autoregularse. Si usáis tierra y os pasáis con el riego, por ejemplo, la tierra consigue absorber ese exceso para que la planta no sufra. Y eso no lo hacen otros sustratos. Por tanto, es ideal para personas sin mucha experiencia. Si se usa tierra, es recomendable regar cada día y abonar cada dos para un mejor cultivo de marihuana.
Otras buenas opciones para la producción de marihuana en interior son:
Asimismo, cultivar marihuana en interior requiere del uso de fertilizantes. Si no se tiene mucha experiencia es recomendable empezar con un abono orgánico. En todo caso, déjate aconsejar por un experto y seguro que aciertas.
A la hora de regar, es importante fijarse en dos cosas:
Una vez definido el sustrato, hay que entender que cultivar marihuana en interior, como cualquier otro cultivo indoor, requiere de una serie de aparatos. Estos permiten crear las condiciones necesarias para el crecimiento de las plantas en un entorno per se poco aireado, sin sol ni lluvia.
Todas las plantas necesitan luz para crecer y en interiores no hay. Por tanto, una de las mejores ideas para el cultivo de cannabis en interior es colocar focos o bombillas que simulen la luz del sol y que alumbren las plantas. Un cultivo de maría necesita unos 600W de luz HPS por metro cuadrado para florecer, así que hay que asegurarse de que la luz está bien distribuida. Los focos tipo Cooltube son una opción más que recomendable.
La plantación de maría ha de estar bien ventilada, lo cual no es sencillo. Para ello se necesitan extractores de aire que se ajusten a las necesidades de las plantas. Existen distintos tipos de extractor y elegir unos u otros puede depender de múltiples factores. No obstante, el principal es que debe ser capaces de airear toda la plantación de cannabis, renovando el aire cada 2 minutos. Para calcular la potencia de extracción necesaria se siguen los siguientes pasos:
Por otra parte, en las grandes plantaciones de interior, probablemente haga falta un generador de óxido de carbono, ya que este elemento es necesario para la fotosíntesis.
Los sistemas de riego requieren de una bomba para hacer circular el líquido.
Finalmente, hay algunas ideas para el cultivo de cannabis en interior que hay que tener en mente:
Para finalizar, si quieres cultivar cannabis de una forma realmente cómoda, eficaz y rentable puedes utilizar nuestros armarios de cultivo vertical. Porque nuestra estructura para cultivo tiene capacidad para 400 macetas e incluye soporte para iluminación tipo cooltube. Este sistema de cultivo en solo 4 metros cuadrados permite un crecimiento controlado de la planta; además solo requiere un adecuado control de la poda para obtener el máximo rendimiento de la planta.
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